La venganza del Kremlin en Guatemala
La venganza del Kremlin en Guatemala
Esta es una traducción al español del artículo de Mary Anastasia O’Grady publicado por The Wall Street Journal el día 25 de marzo de 2018 a las 3:11PM ET, supongo que el artículo original tiene derechos de autor, por lo que aclaro que la traducción del mismo obedece a la ley de “fair use” o “uso justo” ya que es: no-comercial, transformativo, con fines educativos e informativos, de igual manera pueden ver el artículo original en el siguiente vínculo:
A U.S.-subsidized U.N. commission helps bring about a dubious prosecution.www.wsj.com
El estado ruso tiene un largo tentáculo cuando se trata de mostrar su poder. El señor Igor Bitkov, su esposa, Irina, y su hija de 26 años, Anastasia, lo experimentaron de la peor forma. Esta familia huyó de Rusia en 2008 y ahora se encuentran guardando prisión en Guatemala debido las sentencias que les fueron impuestas, las cuales se originan en una denuncia de un banco estatal ruso al que esta familia debía dinero.
En los juzgados guatemaltecos no se presentaron medios de prueba sólidos que respaldaran el reclamo del banco. Sin embargo, la fiscal general, Thelma Aldana, atendió las acusaciones rusas y así como la solicitud de la Comisión Internacional contra la Impunidad de las Naciones Unidas en Guatemala (CICIG) para procesar a la familia en abril de 2015 por cargos relacionados. Los Bitkovs fueron condenados en enero de este año.
La historia tiene el mismo tono de una estrategia familiar de acumulación de activos utilizada por los expertos del estado ruso, es decir, la pandilla de Vladimir Putin, y su práctica de destruir adversarios. También respalda las denuncias de algunos demócratas guatemaltecos que señalan que la CICIG, financiada en parte por EEUU, lejos de fortalecer el estado de derecho en su país, se ha convertido en parte del problema.
El Sr. Bitkov era el propietario de North-West Timber Company (NWTC) con sede en San Petersburgo. En 2005, pidió un préstamo a un grupo de bancos estatales rusos para actualizar algunas de sus fábricas. Al mismo tiempo, un alto ejecutivo de uno de los bancos que le prestó dinero, le ofertó comprar el 51% de su compañía, el Sr. Bitkov rechazó esta oferta según me contó desde la prisión a través de su abogado guatemalteco Rolando Alvarado la semana pasada.
De acuerdo con los estados financieros de la compañía, de 2005 a 2007 los ingresos de NWTC crecieron en un 30%. En 2007, Sberbank valoró a la compañía en $ 428 millones, para 2008 habían reembolsado el 71% del préstamo junto con los intereses correspondientes, NWTC valía 2.7 veces los $158 millones restantes, sin embargo, en abril de 2008, los bancos exigieron el pago completo del préstamo de inmediato, según cuenta Bitkov.
Bitkov no podía cumplir con esta exigencia por lo que la empresa se vio obligada a declararse en quiebra, el Sr. Bitkov alega que el administrador de bancarrota vendió los activos de NWTC a precios de liquidación a entidades controladas por varios ejecutivos de los bancos.
Los Bitkov temían por sus vidas y huyeron del país, el Sr. Bitkov dice que en el exilio recibió llamadas telefónicas de la inteligencia rusa que intentaba extorsionarle y enviarle amenazas de muerte.
En 2009 la familia Bitkov instalada en Turquía, vio un anuncio en Internet que ofrecía pasaportes y documentos de identidad guatemaltecos emitidos en oficinas gubernamentales de Guatemala. Se establecido en los juzgados que los Bitkovs pagaron $150,000 dólares por este servicio, ingresaron a Guatemala en sus pasaportes rusos y luego recogieron sus nuevos documentos en la oficina de migración del país, en el registro nacional de ciudad de Guatemala, en enero de 2012, la Sra. Bitkov dio a luz a un hijo al que llamaron Vladimir.
El banco VTB, uno de los acreedores rusos propiedad del estado que compró los activos de NWTC, rastreó a los Bitkovs hasta Guatemala e intentó que el señor y señora Bitkov fueran procesados penalmente por fraude, lavado de dinero y por uso de documentos fraudulentos con el fin de evadir la ley. La CICIG y la Fiscal General Thelma Aldana tomaron la denuncia del banco el 15 de enero de 2015, la policía guatemalteca arrestó a Igor, Irina y Anastasia bajo sospechas de usar documentos falsos. El Banco VTB fue nombrado querellante adhesivo en el caso.
Con los Bitkov en prisión, Pavel Astakhov, el comisionado de Rusia para los derechos del niño, solicitó desde Moscú una orden para extraditar al niño Vladimir (nacido en Guatemala) para llevarlo a Rusia, por suerte, su solicitud no tuvo éxito, sin embargo, un tribunal rechazó la solicitud de la señora Bitkov para que cuidara del niño, llevándolo a caer en uno de los más abominables orfanatos de Guatemala, fue rescatado 42 días después y se le encontró con conjuntivitis en ambos ojos, una infección de las vías respiratorias superiores, una cicatriz sobre su ceja izquierda y un diente frontal astillado.
En 2013, el presidente del Banco VTB Andrey Kostin le otorgó a Henry Philip Comte Velásquez — de la firma de abogados guatemalteca Comte & Font — poder notarial en el caso. La firma de abogados me dijo la semana pasada vía correo electrónico que esto es habitual al momento de litigar para un cliente, que el Sr. Comte delegó ese poder a los abogados de su firma, y que “no ha actuado a forma personal en nombre del banco en ningún proceso legal”, pero, por falta de medios de prueba, los fiscales no persiguieron presunto delito de lavado de dinero, al mismo tiempo incluyeron que el Banco VTB no pudo demostrar el fraude, entonces, en mayo de 2017, un tribunal de apelaciones eliminó al banco como querellante adhesivo, sin embargo, la CICIG y el fiscal general continuaron presionando fuertemente para obtener condenas penales.
En diciembre de 2017, otro tribunal de apelaciones dictaminó que las infracciones de documentos eran infracciones administrativas punibles únicamente con una multa y que los Bitkovs no habían cometido ningún delito penal, sin embargo, la CICIG, Thelma Aldana, y un tribunal dirigido por la juez Iris Yassmin Barrios Aguilar (una juez de izquierda conocida por su activismo político) ignoraron este fallo, el 5 de enero, se condenó a Irina y Anastasia a 14 años de cárcel; Igor tiene 19 años, un año más que la pena por homicidio en Guatemala.
Miles de extranjeros en Guatemala han sido víctimas de estafas migratorias vinculadas a agencias del estado, solo los Bitkovs fueron procesados como si fueran parte de una red de crimen organizado, por otro lado, en 2003, el magnate petrolero ruso Mikhail Khodorkovsky tuvo un altercado con Vladimir Putin y pasó 10 años en la cárcel, en Guatemala, gracias al alcance del Kremlin, los Bitkovs podrían pasar una peor suerte.