Como lo he dicho siempre, somos muchos los que queremos un mejor país, los que queremos que la “vieja política” deje de imperar, que el legítimo pueblo tome control de su destino y sea verdaderamente su voluntad la que impere en el país. Por un tiempo creí en la “lucha contra la corrupción” hasta que vi cómo se convirtió en una cosa sensacionalista, los medios de comunicación fueron los primeros en ser demasiado obvios, luego fueron los “influenciadores”, luego las cientos de cuentas vía Twitter y Facebook que acosan, difaman y censuran a quien cuestione un poco a la sacrosanta Thelma Aldana, al beato Iván Velásquez Gómez, a su santidad Helen Mack y a la inmaculada Lucrecia Hernández Mack, el constante acoso que recibí de estas cuentas fueron el detonante para que pusiera manos a la obra para saber quiénes eran, algo que he repetido varias veces, y ahora ya sabemos quiénes son, aunque aún no están todos… paciencia.
El grupo de actores que tiene la hegemonía mediática, legal y cultural ganada (o cooptada), me guste o no, es un grupo que evidentemente utiliza un discurso de izquierda para apelar a las mayorías, un discurso que empezó con la loable exigencia de igualdad para los géneros y terminó convirtiéndose en imposición de ideales alejadísimos de la realidad, nadie puede garantizar la igualdad de resultado y quien lo promueva es literalmente un fascista. También iniciaron con el loable discurso que promovía el uso de tecnologías de licencia libre, y pasaron a un discurso “anti-capitalismo”, “anti-imperialista”, “el que use Apple o Microsoft es un cerdo capitalista”, se fundamentalizaron. Pasaron de un loable discurso de tolerancia y aceptación a la comunidad LGBTI a uno de imposición de normas que NO reflejan la forma de ser y pensar del guatemalteco, menos la aberrante idea de destruir el idioma. Pasaron del loable ideal de buscar la libertad femenina a la nefasta idea de dictarle a las mujeres cómo vestir, cómo hablar, cómo “pensar” y para colmo, prohibiéndoles buscar su propia felicidad vía su libertad, pasaron de la tolerancia a las diferencias en identidad de género a la desastrosa idea de convertir en norma el masculinizar a la mujer y feminizar al hombre, y con todo eso buscaron crear y ganar grupos de presión para empujar una agenda político partidista, y como siempre lo dije, bobo el que no se de cuenta.
También, como siempre dije, mi problema no es que estos grupos sean o no de izquierda, es más, yo en algún momento sentí muchísima simpatía por sus causas, puesto que me parecían loables, hasta que se fueron a los extremos, lo que me hizo indagar y darme cuenta que mentían de forma rutinaria y hasta compulsiva, y si algo detesto profundamente, es que nos quieran ver la cara de tontos.
Y “arjoneando” un poco, el problema NO es que sean de izquierda, el problema es que lo nieguen, el problema NO es que prediquen ideologías fracasadas, el problema es que ni siquiera los líderes se las creen, el problema NO es que digan una cosa, es que en acciones, hagan otra totalmente diferente, como sucedió con la supuesta “lucha contra la corrupción”, el trampolín político de Thelma Aldana, y si usted cree que la finalidad es sólo esta, sólo le hace falta morir, porque engañado ya está, hay un plan más grande detrás de todo esto, y actores muy poderosos.
El problema de estos grupos fue querer imponer, en vez de proponer, y a la fuerza, ni la comida es buena, y (perdón lo repetitivo) como le dije a varias personas de izquierda, yo NO soy su enemigo, en muchas cosas coincidimos, pero si creen que la solución es vía la imposición, vía el engaño, vía la cooptación de las instituciones, vía un lobby internacional con países que tienen grandes intereses políticos, económicos y comerciales en Guatemala, vía el encarcelamiento y polítización de la justicia, vía la total violación de los derechos humanos de sus opositores… ¿Qué tan diferentes son de las dictaduras que dicen odiar?
Ahí he visto a varios miembros de Semilla desenamorados o mejor dicho, de forma literal, “desencantados” de su proyecto político, descubrieron el agua azucarada y se dieron cuenta que están siendo tontos útiles de grandes jugadores, que esas de “nueva política” nadie fuera de su círculo de masturbación se los cree, y luego del inescrupuloso bullying, acoso y difamación que he recibido, debería sentirme contento de verlos desmoronarse, sin embargo no es ese mi sentir, yo también me siento profundamente decepcionado, porque el problema no sólo está en Semilla.
Ahí circuló un vídeo en las redes donde Thelma Esperanza Aldana Hernández hace un llamado a la unidad del partido… Veamos, si un partido está unido… ¿Hace falta llamar a la unidad? Y entre los dimes y diretes de la epopeya (o Via Crucis) que pasa el partido, presumen que Thelma intentó participar con Encuentro por Guatemala y no pudo, intentó con otros partidos de extrema izquierda y la mandaron a volar, así que se quedó en Semilla donde tampoco la terminan de querer… ¿Para quién irán a trabajar entonces los que ya tienen preparado el fraude electoral? Porque insisto, si no está poniendo atención a lo que pasa en el Tribunal Supremo Electoral, se está perdiendo de la mejor novela de la historia de Guatemala.
Luego circuló un vídeo afirmando que Semilla está más unido que nunca, sin nada que probara esa supuesta unidad, sólo diciendo que quien lo negara, era una persona que hacía campaña negra, pues bueno, eso me lleva a compartirles la siguiente publicación de Silvia Karina Arreaga Orozco quien según la misma página de Semilla es la Suplente VIII del Comité Ejecutivo Nacional. (No sólo es de compartir, es de corroborar la información):
SIEMPRE HE CREÍDO QUE CALLAR ANTE LAS INJUSTICIAS ME HACE PARTICIPE DE ELLAS.
https://www.facebook.com/silvia.arreaga.12/posts/2301557136544312
Hace poco más de 2 años me sume a un proyecto en el que creí y por el que he trabajado MOVIMIENTO SEMILLA, aun no éramos partido político, San Marcos se convirtió en un departamento fuerte con personas de principios y valores, pero con el tiempo nos convertimos en la piedra del zapato de este movimiento. Paso de ser un movimiento político a un vehículo electoral con fines puramente personales, para lograr estos fines construyeron bases en varios departamentos para poder controlar el comité ejecutivo nacional, dentro de este comité estamos tres personas de San Marcos pero una de ellas no cuenta como de San Marcos ya que siempre se ha alineado a los procesos corruptos que se han dado en este movimiento. Soy secretaria adjunta del municipio de San Pedro Sac., secretaria Adjunta Departamental y suplente en el Comité Ejecutivo Nacional, puestos a los cuales llegue democraticamente. Estando a lo interno y en estos puestos puedo hablar con la verdad y con fundamentos de lo que está pasando en semilla. Como departamento llegamos hasta este día creyendo que podríamos incidir y hacer la diferencia dentro de la política guatemalteca a través de este Partido Político, pero hoy personalmente he decidido renunciar a todo lo que tenga que ver con semilla, este movimiento perdió sus ideales y sus principios, paso a ser uno más del montón dispuesto a cualquier cosa para llegar al poder, lamentablemente cayó en manos de ambiciosos hambrientos de poder que no están pensando en el país. Se que harán una y mil cosas para decir que todo esto es mentira pero creo que los guatemaltecos no debemos seguir permitiendo que los partidos políticos solo usen a los departamentos como escalera para llegar a puestos de gobierno y luego aprovecharse de ellos.
Nadie que esté dispuesto a hacer cualquier cosa hasta corromperse por un puesto político debería de llegar a ejercerlo ya que llegara a servirse de ese puesto. Sé que argumentaran que como no me dieron ningún hueso estoy haciendo esto, pero no es así tuve la oportunidad de estar en el listado de diputación distrital pero mi interés era participar en mi municipio y hasta el día de hoy fui la candidata a alcaldesa de este movimiento, pero no quiero ser partícipe de un partido político que le siga mintiendo al pueblo de Guatemala, estoy cansada de la corrupción, pero estoy más cansada de la indiferencia y del silencio. No seré más participe de esta farsa.
De forma honesta y sincera, lamento mucho la desilusión por la que pasa Silvia Karina Arreaga Orozco, puedo simpatizar mucho con ese sentir puesto me ha tocado vivirlo en reiteradas ocasiones desde que decidí cuestionar a amigos y conocidos que sin yo saberlo, también ambicionaban un negocio con el gobierno, igual, no es el fin del mundo… aún.
Hay más tiempo que vida, si no nos imponen un gobierno antidemocrático, si no hacen fraude electoral, tendremos cuatro años para que el legítimo pueblo de Guatemala pueda participar en elecciones, velando por los intereses y necesidades de este y no por agendas de terceros, eso sí, de forma verdaderamente consensuada e inclusiva, proponiendo y no imponiendo, dialogándo y no silenciando, discutiendo y no gritando, sé que se puede, y sé que este es un paso en la dirección correcta, mis felicitaciones a Silvia Karina Arreaga Orozco por su valentía y honestidad, no es fácil ir contra corriente, y a pesar de las diferencias, cuenta con mi apoyo en su decisión.
Me alegra saber que todavía hay gente honesta que no se presta a la corrupción y defiende su postura para lograr el bien de nuestro país. Felicitaciones Silvia, siga adelante que al final es su conciencia lo que importa
Felicitaciones Silvia, asi es y debe ser todo aquel que de verdad ame a su Paĺs.
QUE BUENO QUE SE DIO CUENTA A TIEMPO, DIOS LA ILUMINÒ, AUNQUE NO CREA EN ÈL, SUPONGO , LAS ORACIONES DE SUS ABUELTAS LA SALVARON DE TERMINAR ENRREDADA ENTRE ESAS PIRAÑAS MALOLIENTES…SUERTE A LA PRÒXIM
A…BUSQUE A LA DERECHA..
.
Realmente mis sinceras felicitaciones Silvia Arriaga esto debe de prevalecer la rectitud que necesita nuestro amado Guatemala estamos cansadas de tanta mentira de uno o otro que dise que siembra que …. Quien sabe. Y solo ven sus intereses.