En reiteradas ocasiones, luego de sufrir censura en alguna red social, me han compartido la idea de crear una plataforma alternativa para evitar así la censura, sin embargo, considero que la propuesta es errada, acá varios puntos a considerar:
El costo
Desarrollar una plataforma NO es algo difícil, pero sí algo laborioso, hacer un clon de Twitter a mí en lo personal no me tomaría más de un mes, y a ojo de buen cubero cobraría no menos de $15K por una plataforma web con un API JSON listo para poder desarrollar aplicaciones móviles, que es algo aparte. Por cada aplicación móvil, tomando en cuenta que Google domina el mercado móvil con Android y Apple con iOS, unos $10K por cada aplicación móvil y por lo menos, un mes de desarrollo por app, dividiendo el trabajo, en un par de meses tendríamos una plataforma por aproximadamente $35K, pero eso es sólo el desarrollo, no incluye los servidores.
Un hosting básico para no más de unos 5,000 usuarios sería de no menos de $200 al año, sin embargo, como la meta es tener al menos unos 500 mil en el primer año, un hosting de $500 a $1,000 al mes sería algo más atinado, estamos hablando de $35K de desarrollo más $12K sólo el primer año, sin tomar en cuenta los costos de “mercadear” la plataforma, porque sin usuarios, NO hay red social. ¿Quién está dispuesto a soltar es plata? ¿Cómo se va a financiar? ¿Cuál es el modelo de negocio?
¿Y los usuarios?
Existen diferentes modelos de negocio en cada red social, regularmente nos venden la idea de que Facebook, Instagram, WhatsApp; Google, Youtube. Android, etc. Se hacen de ingresos gracias a la venta de publicidad en sus plataformas, sin embargo, esa es sólo una porción, la otra está en la venta de información personal, la manipulación de la opinión pública, el análisis de comportamiento humano vía inteligencia artificial, etc.
Para que estos negocios tengan éxito, se requiere de tener la mayor cantidad de usuarios posible, en otras palabras, el éxito de cada red social se mide en la cantidad de usuarios que amasa, usuarios que no siempre están convencidos de ingresar todos sus datos personales a compañías que comercian con ellos, porque como bien dice un famoso refrán de las redes, si el servicio es grátis, uno NO es el cliente, sino el producto.
Cada red social ha creado diferentes excusas para seducir a los usuarios a ingresar sus datos, Facebook empezó proponiendo reencontrarnos con viejas amistades; Twitter ofreció conectarnos pública e instantáneamente con el mundo, ser nuestros propios relacionistas públicos; Instagram nos ofreció en un inicio compartir fotos vintage con personas que gustaban de la fotografía, hoy nos ofrece conocer en imágenes la vida de los famosos, comida, o simplemente modelos pay-per-view; YouTube nos ofreció ver contenido independiente y tener un canal de vídeo para compartir con el mundo; WhatsApp nos ofreció mensajes a teléfonos grátis, etc. Todos tenían un gancho, y ese es el principal problema del “hagamos una nueva plataforma”…
¿Cuál es la razón o motivo para que un usuario común y corriente decida crear una cuenta en nuestra plataforma? ¿Libertad de expresión?
Porque plataformas para la libre expresión existen, Gab.com, Parler.com, Minds.com, lbry.tv, BitChute.com, etc. ¿Tiene usted cuenta en estas plataformas? Si la respuesta es NO, pregúntese así mismo ¿Por qué?
Y es que la síntesis de este punto se llama “Market share” o “Cuota de mercado”, por más que exista el mejor contenido en BitChute.com, la mayoría de la gente va a buscar un vídeo en YouTube, por más mercadeo que Microsoft le haga a Bing.com, la gente buscará en Google, por más que figuras públicas relevantes usen Parler.com o Gab.com, la mayoría de la gente va a buscar su perfil en Twitter, Facebook o Instagram, compañías que dominan el mercado y que utilizan cientos de técnicas para mantener sus monopolios.
La administración y recurso humano
Como comenté en el primer punto, desarrollar una plataforma no es complicado, sólo laborioso, sin embargo, ese es el primer paso, el mantenimiento de la plataforma es la parte que más demanda tiempo y recurso humano, tanto en el área de desarrollo e ingeniería, como en lo administrativo.
Y es que resulta ser que para poder tener una red social que pida datos personales, se debe tener personería jurídica para evitar consecuencias legales del abuso de ciertos usuarios, que sin duda alguna, compartirán contenido ilegal, desde material con copyright hasta pornografía infantil, todo con el fin de lograr consecuencias legales en contra de la red social, al mismo tiempo, se requeriría de contratar a moderadores que estén revisando manualmente las publicaciones denunciadas de violar las políticas del sitio, porque por más avanzada que esté la inteligencia artificial, debe ser un humano el que de la última palabra. Todos hemos sido testigos de los garrafales errores de Google al querer implementar inteligencia artificial para moderar contenido, y eso me lleva al siguiente punto…
La censura de plataformas
De no poder contar con moderación que evite el abuso de los usuarios, la red social sería fácilmente abordada por hordas de trolls que destruirían su imagen, causando que sea prohibida en las diferentes tiendas de aplicaciones así como que Twitter y Google muestren una advertencia al momento de compartir un vínculo de la red social, esto le sucedió a Gab.com, BitChute.com, ZeroHedge.com, etc.
Gab.com es una plataforma que nació justamente de la necesidad de libre expresión, medios sediciosos como CNN se dedicaron a destruir la reputación de la red social pintándola como parte del “alt-right”, varios trolls crearon cuentas para compartir contenido ilegal y con ello justificaron toda la campaña de desprestigio, lo cual sirvió de excusa para que Google y Apple prohibieran la aplicación en sus respectivas tiendas de apps, y para que la empresa que les proveía el “hosting” o alojamiento de datos, los sacaran de sus servidores, esto gracias a que la izquierda controla la actual mentalidad de manada y/o pandilla, la cultura de cancelación, evidente en los recientes disturbios en todo EEUU, o estás con ellos, o estás en su contra, llegan en manadas y te incendian tus instalaciones.
Otros factores
Hacer una plataforma también requiere de considerar otros factores, una excelente ingeniería detrás para el constante crecimiento de infraestructura, que sea escalable, que cargue rápido puesto que por un segundo que sea lento el servicio se pierden usuarios, que tenga una interfaz gráfica familiar, simple e intuitiva (algo en lo que Parler.com pierde mucho), integración con otras redes y sobre todo, entusiasmo en desarrolladores que deseen adoptar su API, algo que luego de la actitud de Twitter al cerrar su API, se ve complicado.
Síntesis y contrapropuesta
En síntesis, desarrollar un app no es difícil, sólo laborioso, hacer una plataforma es otra historia, requiere de tener figura legal, el recurso humano necesario para moderar contenido ilegal, una buena inversión y un modelo de negocio, y aún con eso, correr con suerte para no ser censurado por Google o Apple en las tiendas de aplicaciones. ¿Suena eso como una buena inversión?
¿Por qué no mejor les apretamos las tuercas a las redes sociales? Eso fue lo que hicieron en EEUU, en julio de este año los CEOS del Big Tech fueron citados al congreso por muchas de sus prácticas monopolistas, y durante más de 5hrs fueron interrogados en torno a estas prácticas:
De esta citación que disfruté muchísimo ver en vivo, me sorprendió que todas estas redes sigan insistiendo en mantener con puño de hierro las directrices de la corrupta OMS al servicio de Bill Gates y China, ignorando por completo a la CDC de EEUU, la que recientemente publicó que sólo el 6% de las muertes reportadas en la pandemia, fueron realmente a causa de COVID.
Les dejo una pregunta que seguro todo congresista guatemalteco podrá contestarle: ¿Cuánto ha pagado Google, Facebook, Twitter, etc. de impuestos a Guatemala por operaciones que realizan en el país?
Ahora, si con todo lo anterior insiste en que lo mejor es crear o usar otra plataforma, de nuevo, lo invito a usar Gab.com, Parler.com, Minds.com, Bitchute.com, lbry.tv, o crear su propio nodo de Mastodon. Primero veamos qué tan fácil es convencer a las masas de adoptar una red social, suerte con ello. Ah, y con relación a la censura… para algo existen los eufemismos y los canales de Telegram.
Clarisimo para el que quiere oir, lastima que se informan poco. Siga adelante y que logre llegar el mensaje geopolitico a mas gente